jueves, 20 de enero de 2011

LAS ALTERNATIVAS DEL POLO

Luis I. Sandoval M.

Luis Sandoval. *Autor del libro Polo Democrático Alternativo: ¿Hacia dónde, con quiénes?, Democracia Hoy, Bogotá, 2009. Participa activamente en el proceso de este partido desde sus antecedentes en el Frente Social y Político.


La encrucijada del PDA.

Verdadera encrucijada la que vive el Polo en vísperas de su Dirección Nacional convocada para los días 4 y 5 de febrero. Los pronósticos sobre el Polo son negativos prácticamente en todas partes: prensa, otros partidos, universidades, cafeterías, paraderos de bus, hasta en los apuntes de Tola y Maruja… El Polo está herido de muerte se dice.

Pero no todo herido de muerte termina muerto. Se ve en los toros y en la política. Muchas veces se han dado por muertos los partidos Liberal y Conservador y también partidos de izquierda en Colombia y en otros países. El PT (Partidos de los Trabajadores) de Brasil y el FA (Frente Amplio) de Uruguay, que respectivamente alcanzan los 30 y los 40 años de vida y que hoy gobiernan por tercera y segunda vez sus países, fueron considerados sin ningún futuro en varias oportunidades.

Contrario a lo que se dice afuera, dentro del Polo - con distintas lecturas y posturas – se considera que el partido superará los malos momentos actuales y aún los peores momentos que pueden venir, inclusive excompañeros de Gustavo Petro que no lo siguieron en la salida del Polo, y que están muy activos dentro del partido, tienen su forma de ver y de proponer caminos para un Polo que resurja renovado de las cenizas. Los pesimistas totales al interior también existen, pero no son muchos.

Las elecciones parlamentarias y presidenciales de 2010 ya fueron una prueba para el Polo, volverán a serlo, con sensible cambio de circunstancias, las territoriales de octubre de 2011 porque la existencia efectiva de un partido no depende solo de sus grupos internos sino de la acogida y reconocimiento que tenga en la sociedad (Gunther y Hopkin, 2007).

La crisis actual.

El 30 de mayo y el 20 de junio de 2010 el Polo parecía haber salido bien librado del reto que representó su tercera campaña presidencial (2002: Polo Democrático, candidato Luis Eduardo Garzón; 2006: Polo Democrático Alternativo, candidato Carlos Gaviria Díaz) adelantada en medio de difíciles circunstancias externas e internas. En dos años habían sido asesinados numerosos activistas del partido en diferentes regiones, las chuzadas del DAS se habían utilizado como un instrumento de hostigamiento político contra dirigentes como Gustavo Petro, Carlos Gaviria y otros dentro del partido, el gobierno había adelantado una intensa campaña de estigmatización y desprestigio utilizando, entre otros medios, la memoria rediviva de los nefastos sucesos del Palacio de Justicia (1985).

Las últimas siete semanas de campaña, entre el 13 de abril y el 30 de mayo, habían sido espléndidas. El partido unido alrededor de Gustavo Petro y de Clara Lopéz logró un extraordinario impacto de opinión, Petro fue considerado el candidato más sólido y obtuvo el cuarto lugar en la votación con un millón cuatrocientos mil votos. El partido logró instalar en la opinión temas cruciales de la agenda pública como el de tierras. Atrás quedaban las diferencias de la consulta, del bloque antiuribista, del no entendimiento con los Verdes, de la abstención, voto en blanco, o voto por Mockus en la segunda vuelta.
El hecho final incuestionable era un partido que seguía vivo y un acumulado importante para jugar como eje de la oposición pero siendo perceptivo de la exigencia de cambios, la pérdida de peso del uribismo puro, el surgimiento del santismo y su iniciativa de unidad nacional con banderas de ciertas reformas, el tránsito del liberalismo del ámbito de la oposición al bloque de gobierno y el posicionamiento de un centro ambiguo que a través de los Verdes dice no estar en el gobierno y tampoco ser oposición.

Se vive un momento en el cual el país experimenta un sentimiento de alivio y aún de optimismo como lo indican encuestas que le dan al Presidente Santos 85% de favorabilidad. Ello en contraste con el aumento, también comprobado, de los índices de desigualdad y de pobreza y la muerte de centenares de miles de personas a manos del paramilitarismo y sus bandas sucesoras. 
En esto estamos mientras el Polo, al día siguiente mismo de terminada la contienda, se ve sacudido por el no reconocimiento de Petro como Presidente del Partido, por la iniciativa de éste para hablar con el nuevo Gobierno y por nuevos hechos indicativos de irregularidades en la contratación en Bogotá. Está en juego la conducción del partido, el sentido de la oposición al nuevo gobierno, la relación con la movilización popular y la forma de plantearse frente a la administración de Samuel Moreno. Sobre ésta última, qué hacer: respaldarla acríticamente o ejercer frente a ella el derecho y deber de control político. 

La presidencia del partido. El CEN (Comité Ejecutivo Nacional) del Polo, poco después del 20 de junio, ratifica a la Doctora Clara López Obregón como Presidenta de la Colectividad. El preacuerdo existente era que al terminar la campaña el candidato presidencial asumía la presidencia, así había ocurrido en la campaña de 2006 cuando el candidato fue el Doctor Carlos Gaviria. Esta decisión se tomó por mayoría no por consenso como era también el criterio ganado dentro del partido. La razón de la presidencia en cabeza de quien acaba de ser el candidato del partido es que permite aprovechar mejor los acumulados de la campaña en función de la etapa siguiente de acción política, muy importante en las condiciones de la izquierda que se sobrepone a enormes y numerosas dificultades. La izquierda no se puede dar el lujo de perder acumulados caprichosamente.

Frente al Presidente Santos. El partido no maduró en una deliberación organizada y orgánica la posición frente al nuevo gobierno. Se produjeron dos precipitaciones: la precipitación de decir que Santos era Uribe III y la precipitación de Petro de ir a plantear al Presidente electo temas posicionados con éxito ante la opinión durante la campaña pero que no habían sido puestos aún en la plataforma de juego de la oposición polista como era lo normal. El nuevo contexto exigía construir ciertamente sin dilación pero en las instancias colectivas un nuevo diseño de acción política. 
Petro planteó y practicó la oposición dialogante, el Senador Robledo planteó y practicó la oposición a secas para decir no a todo, la Presidenta del partido, el Senador Avellaneda y el Representante Cepeda se ocuparon de proyectos concretos  y los hicieron avanzar sustantivamente con críticas y propuestas oportunas. En el Polo nadie sabe hoy a ciencia cierta cuál es el tipo de oposición que debe hacer el partido y sus parlamentarios o si todos los tipos de oposición son válidos, incluidas la opinión analítica de los columnistas y la protesta social de los movimientos populares en las calles.
Alcaldía de Bogotá. Este es el campo en que se producen los hechos más relevantes y las discrepancias más graves. El tema no surge después de la campaña presidencial, tiene larga trayectoria, no se refiere solo a la contratación sino a la orientación del plan y políticas públicas, a la forma de conformar el equipo de gobierno y a la forma de coaligarse en el Concejo de la ciudad para hacer posible la gobernabilidad. Es el inmenso tema de las relaciones políticas donde se crean las condiciones para el ejercicio del poder, la permanencia en él y su reproducción.

GOBIERNOS DEL PDA 2008 – 2011.
En el período 2008 – 2011 el Polo Democrático Alternativo tiene la Alcaldía Mayor de Bogotá y 12 de las 20 Alcaldías Locales en la ciudad, la Gobernación de Nariño y 11 Municipios en este Departamento y otras 9 alcaldías municipales en 5 Departamentos diferentes.

En Bogotá las Alcaldías Locales en cabeza del Polo son: Bosa, Kennedy, Fontibón, Engativá, Los Mártires, Puente Aranda, Chapinero, Ciudad Bolívar, Santafé, Usme, Candelaria, Rafael Uribe Uribe.

En Nariño las Alcaldías Municipales en cabeza del Polo son: Consacá, El Charco, Gualmatán, La Tola, Linares, Magui (Payán), Mosquera, Ricaurte, Roberto Payán (San José), Samaniego, Santa Bárbara (Iscuandé),

Las otras 9 Alcaldías Municipales en diversos Departamentos en cabeza del Polo son: Palomar de Varela y Polo Nuevo en el Atlántico,  Armero y Flandes en el Tolima, Fortul en Arauca, Uribe en Meta, San Calixto en Norte de Santander, Yumbo en Valle.

Fuente: archivo del PDA con base en datos de la Registraduría Nacional y el Consejo Nacional Electoral. Estos datos pueden haber sufrido cambios en los tres años transcurridos del período. Algunas alcaldías se habrán perdido, otras se habrán ganado.  No ha habido organismo partidario encargado de hacer seguimiento de estos gobiernos del partido en ningún nivel.  Información preparada por Luis Sandoval.

El supuesto básico es que el Alcalde gobierna con su partido, naturalmente con las fuerzas aliadas que contribuyeron al triunfo y con las cuales se tenía un acuerdo programático. Como se venía de la experiencia de Bogotá Sin Indiferencia en que Lucho Garzón prefirió mantenerse a distancia del PDI primero y luego del PDA, todos los precandidatos del PDA firmaron en 2007, antes de la consulta interna, un compromiso de que quien ganara la consulta y resultara elegido gobernaría en coordinación con el partido, naturalmente con transparencia y fidelidad al Ideario del partido.

Una vez posesionado el segundo Alcalde del Polo, Samuel Moreno, el primer fenómeno que se da es que al comienzo del gobierno se prefiere que cada grupo hable por separado con el Alcalde en lugar de hacerlo colectiva e institucionalmente, entablando una relación programática a través del CEN. Lo segundo es que ante los reparos que comienzan a aparecer en la prensa y ante hechos directamente constatados se desestiman las iniciativas de diferentes miembros del CEN que consideran necesario asumir el seguimiento de la administración (Testimonio de Guillermo Asprilla miembro del CEN). Lo tercero es que el dirigente y precandidato Gustavo Petro considera llegado el caso de solicitar por carta a la administración del Alcalde Samuel Moreno que cree una Comisión para que clarifique los rumores sobre transgresiones a la transparencia en la gestión de la ciudad y recomiende correctivos al respecto. Fue trasladada a un funcionario de tercera línea en la Secretaría de Gobierno. Lo cuarto es que el Doctor Carlos Gaviria observa que realmente a la ciudad no la está gobernando el Alcalde del Polo con el Polo sino con otras fuerzas inclusive contrarias al Polo.

Sin duda en todo momento ha habido fuerzas de derecha interesadas en explotar las debilidades de la administración, pero el mal no hay que buscarlo en las sábanas, hubo diagnósticos certeros y alertas tempranas dentro del propio Polo que no fueron atendidos. Problemas serios de gestión y de política fueron atribuidos a factores exógenos o tratados como asuntos de maledicencia y de imagen. Corta y equivocada visión.  

La inmensa inversión, cercana posiblemente a los 1000 millones de dólares, y expresada en 230 obras en ejecución, constituía por sí misma un real proyecto de transformación de la ciudad que paradójicamente no impactó a la ciudadanía con la figura de un gran Alcalde sino que éste comenzó a pasar como un funcionario que vivía de locha, que fatigó la ciudad con un exceso de obras simultáneas y que, amén de eso, presuntamente facilitaba prácticas contrarias a la transparencia a través de su hermano el Senador Iván Moreno que se engranaba con lo que los medios dieron en llamar el cartel de la contratación. Las evaluaciones negativas de la administración se volvieron rutinarias. Este deterioro de la administración de Bogotá se asume como uno de los factores que contribuyeron al descenso en número de curules polistas en las elecciones parlamentarias de marzo y también a la reducida votación obtenida por el candidato presidencial del Polo en el mismo espacio de la urbe capitalina. Todas hipótesis por comprobar.

Los medios y los entes de control y judiciales se ocupaban crecientemente de los indicios de manejos irregulares en la contratación de las grandes obras distritales. Se creó entonces un dilema: mantener la actitud inactiva y silenciosa de las instancias partidarias arriesgando la suerte del proyecto político o asumir el camino del control político desde el propio partido en coherencia y en defensa del proyecto político. Agotadas las gestiones al interior del partido, se optó por el segundo camino, fue cuando se creó la Comisión de Informe sobre la Contratación en la ciudad conformada por el Excandidato Gustavo Petro, el Senador Luis Carlos Avellaneda y el Concejal de Bogotá Carlos Vicente de Roux.

Tan justo y obvio se encontró el surgimiento de la Comisión que el propio Alcalde Samuel Moreno y la Presidenta del Partido Clara López solo tuvieron palabras de acogida y anuncios de cooperación para ella. La Comisión entregó el resultado de sus trabajos en la primera quincena de octubre de 2010. El informe tomó un cauce institucional en el partido a través de la Comisión de Ética con aval del CEN, pero la interpretación de la motivación produjo una enorme fractura política: lo que para unos era una acción sana de reparación y rectificación a favor de partido y proyecto político, para otros era la prolongación de una acción de la extrema derecha contra del partido y su gestión en Bogotá.

El sector mayoritario del CEN, solidario con la administración, se pronunció el 25 de octubre y pocos días después lo hizo el sector minoritario del CEN, solidario con el Informe de la Comisión. Estos pronunciamientos, para analizar, marcan la culminación del enfrentamiento interno y anuncian desarrollos lamentables.    

Salida de Petro. Estas son las circunstancias en que el Excandidato Gustavo Petro y algunos integrantes de la Corriente Democrática consideran que no hay nada que hacer en el Polo, que la actitud de la dirección es incorregible, no solo es excluyente de sectores importantes del partido sino que es connivente con prácticas que riñen con el principio de transparencia definitorio del proyecto político, por ello deciden su retiro del partido en reunión con presencia de regiones que efectúan el 1 y 2 de diciembre en Bogotá. No obstante, la mayoría de los integrantes de esta corriente se mantiene dentro del partido por considerar no solo válido sino viable el proyecto político a pesar de las enormes dificultades que ha afrontado en el pasado y afronta en la actualidad.   

Estrategias frente a la crisis.

Frente a la crisis así gestada y configurada pueden identificarse tres estrategias a través de las posturas y acciones de los diversos sectores al interior del partido: Defensa de Logros, Seguir caminando, Rectificar errores. Con estas estrategias se trata de impedir que el partido se vaya a pique perdiendo su cohesión organizativa y su presencia social y electoral entre la población.

Defensa de Logros. El Polo Democrático, a través de los gobiernos de Lucho Garzón y de Samuel Moreno ha adelantado una obra de inmenso alcance social y de real transformación de la ciudad en aspectos centrales. El énfasis del primer gobierno estuvo puesto en el hambre, la educación y la salud, el segundo continuó la tarea social y se empeñó en atacar a fondo el problema de la movilidad. Uno y otro lograron avances importantes en materia de seguridad ciudadana. Bogotá crece seriamente como ciudad de derechos y es la gestión administrativa territorial que más ha logrado en 20 años por hacer realidad la Constitución del 91. El Partido tiene sobrados motivos para defenderla y enorgullecerse de ella. 

Seguir caminando. La crisis no puede ser causa de parálisis. El proyecto de transformación democrática por vías de acción civil que el Polo levanta está plenamente vigente y es preciso continuar luchando por su realización práctica en todos los municipios y espacios étnicos y culturales de Colombia. La defensa y desarrollo de la Constitución es una tarea a la orden día cuando se la quiere desfigurar y frenar con proyectos como la sostenibilidad fiscal y otros. La restitución de tierras y el desarrollo rural son una prioridad crucial de la nación íntimamente relacionada con la economía, la equidad y la paz política. El Polo se debe mover con una política de alianzas amplia hacia las elecciones territoriales de octubre próximo… El Polo enfrenta con eficacia las dificultades actuales mostrando firmeza en sus objetivos.     

Rectificar errores. Rectificar no es debilidad sino fortaleza. Esta es la estrategia que está implícita en la acción emprendida por la Comisión de Informe sobre la Contratación. El autocontrol político es para corregir el rumbo cuando se comprueba que efectivamente se ha desviado. Con la iniciativa de la Comisión y los resultados que las investigaciones arrojen confirmando o desmintiendo los indicios de irregularidades el partido rescata ante la ciudadanía la credibilidad en la voluntad indeclinable de recrear y dignificar la política y el ejercicio del poder público. Los partidos hermanos en América Latina que han sabido rectificar errores a tiempo ascienden al poder o se mantienen en él como es el ejemplo que nos dio el PT de Brasil en 2005 ante hechos de corrupción en el Gobierno de Lula y el que nos acaba de dar el Gobierno de Evo Morales en Bolivia que tuvo el coraje de reversar los decretos de lo que se llamó el gasolinazo ante la inconformidad manifiesta de su base social. Está comprobado que rectificar es también una estrategia de supervivencia y recuperación en momentos de crisis.

Los hechos obligan a la reflexión y comienzan a insinuarse cambios de posición. El Concejal de Bogotá, Jaime Caicedo, hace público un pronunciamiento que claramente señala: “defender la obra, corregir los errores”. El Representante a la Cámara Iván Cepeda ha tomado la iniciativa con otros destacados parlamentarios, dirigentes y sectores de señalar que “ante las denuncias e investigaciones en curso no cabe ninguna clase de actitudes cómplices o acríticas. Ni las prácticas clientelistas y parlamentarias de la vieja política, ni los personalismos disolventes, ni el hegemonismo grupista son buenos consejeros en este viaje para reposicionar el Polo”. Muchos y muchas se siguen pronunciando en este sentido.  

Exigencia de Garantías para el 4 y 5 de febrero.     

En mi opinión, el partido puede avanzar si libera a su interior toda la energía participativa de sus afiliados y afiliadas y de sus sectores integrantes en las regiones y a nivel nacional, si acoge el movimiento de base que está surgiendo. La democracia, la apertura y el debate es el mejor antídoto frente a la crisis. Quizá por ello distintos sectores están solicitando un acuerdo político previo a la reunión nacional del 4 y 5 de febrero sobre cuatro puntos:

1. El compromiso serio y explícito de respetar la regla del consenso en las decisiones fundamentales del partido. 2. Un acuerdo sobre la agenda de la Dirección Nacional y las reglas de procedimiento para el desarrollo de la misma, de manera que se garantice el debate abierto, democrático y la participación en condiciones e igualdad para todos los sectores y tendencias.

3.  La inclusión en la agenda de la Dirección Nacional de la discusión sobre la gestión de la Alcaldía de Bogotá, sus relaciones con el partido, los acuerdos de gobernabilidad con otros partidos, sus consecuencias para la suerte de nuestro proyecto, y el debate político sobre las distintas denuncias presentadas por los miembros del partido, así como la posición del Polo al respecto. 4.  La designación de Presidencia y Secretaría General del Partido.

La precandidatura de Carlos Vicente de Roux a la Alcaldía de Bogotá.

Esta es la primera precandidatura que se anuncia explícitamente desde el interior del partido (El Espectador 14 de enero). Los otros nombres que se han mencionado son los de Carlos Gaviria, Jaime Dussán, Carlos Bula y Clara López, Presidenta del partido. El anuncio del nombre de Carlos Vicente de Roux es importante porque representa la estrategia de rectificación, juega dentro del partido, estaría dispuesto a su consulta interna, cuenta con el apoyo de Gustavo Petro y podría eventualmente participar en una consulta interpartidista.

El alto costo de la debilidad.

El Polo está jugando y seguirá haciéndolo pero es preciso reconocer sin vacilación que la experiencia del PDA es la experiencia de una institucionalidad partidaria débil: los proyectos particulares, grupales o personales, se sobreponen al proyecto común, el partido desde sus instancias no gobierna, es decir no orienta, los grupos, ni los liderazgos, ni sus gobiernos, ni sus bancadas, ni sus afiliados y afiliadas, ni sus prácticas. Lo que hoy ocurre en Bogotá, puede decirse es el alto costo de la debilidad. El PDA tiene que decidirse por fortalecer la institucionalidad partidaria. Un partido de institucionalidad fuerte modela y mantiene en cintura, sin ahogar su iniciativa, a los grupos, los líderes, los gobiernos que elige, y renueva e imprime su sello a la práctica política a fin de generar esperanza y suscitar confianza.

Cuando la institucionalidad partidaria es fuerte el movimiento centrífugo de la pluralidad (entropía) se neutraliza y canaliza a través del movimiento centrípeto de la articulación (sinergia). La institucionalidad partidista fuerte produce identidad, apego, acumulación, esto es, no solo orientaciones claras sino afectos, emociones y aún pasiones que operan como movilizadores de la voluntad política. Una dinámica de este tipo solo se da en virtud de una intensa y sostenida acción cultural política que no ha tenido lugar en ningún momento de la trayectoria del Polo Democrático Alternativo. 

miércoles, 12 de enero de 2011

Alfonso Cano

Luis I. Sandoval M.


La sociedad está blindada contra lo que digan las Farc y el Eln. Más credibilidad tienen los diablos de Riosucio de fiesta por estos días. Pero alguien tiene que tomar el riesgo de decir que hay que poner atención a las guerrillas porque ese sí es un infierno real del que tenemos que librarnos mientras le abrimos todo el espacio al infierno lúdico de Riosucio.

Alfonso Cano acaba de hablar, por segunda vez en lo que lleva de gobierno el Presidente Santos, para referirse al tema de víctimas y tierras a propósito de los proyectos que cursan en el Congreso de la República. Resumo la postura de Cano de la transcripción del video en Internet.
“Reclamo especial atención alrededor de dos proyectos de ley que hacen trámite en el Parlamento, uno la reparación de las víctimas de la violencia que sufre el país desde hace más de 62 años, y el segundo alrededor de la propiedad y usufructo de la tierra”. “Los dos temas necesitan – y eso lo debemos luchar – bases ciertas y manejos serios, si se pretende contribuir de verdad a la solución del conflicto”. “Esto es imperioso, pero todo el proceso sería un esfuerzo inocuo si no se tiene como sustento la decisión de liquidar el latifundio…” “Estos dos proyectos de ley tienen un condicionante esencial… deben participar protagónica y decisoriamente los sectores afectados”.

“Sería iluso pensar que un parlamento como el actual, de tanta y tan reconocida herencia y representación narco-paramilitar va a sacar adelante una Ley de Tierras y una de Reparación de Víctimas que favorezca en justicia a los sectores populares”. “Haciendo parte estos dos aspectos de la raíz del conflicto colombiano, es evidente que se requiere de un escenario realmente democrático y representativo, que agarre el toro por los cachos y proyecte una solución definitiva”.

Frases textuales para analizar. Los diarios, tímidamente, han informado sobre esta postura. Cecilia López ha observado que por la vía que sigue el Presidente Santos podría llegar la paz y Eduardo Posada Carbó considera que hay que buscarle fin al conflicto hablando pero que antes debe darse un acuerdo entre los diferentes sectores de la sociedad. La Comisión de Conciliación insiste en ocho mínimos para la paz, uno de los cuales es precisamente el tema de tierras. En el Plan de Desarrollo Prosperidad para Todos, actualmente en discusión, existe el título “Consolidar la Paz” pero sin ningún contenido. El Consejo Nacional de Planeación debió intentar en el concepto sobre el plan llenar este vacío.

El tema de tierras se discute por todas partes y todo mundo asume que es la prioridad nacional: nudo del conflicto, espacio de las mafias, posibilidad para la economía, oportunidad para reparar a gentes injustamente despojadas. Muchos son concientes de las limitaciones del Congreso, pero también de las inmensas conveniencias económicas y políticas que llevan a dar pasos reales. Nunca antes habíamos llegado a tocar un tema medular del conflicto como ahora.
Incluso con una disposición clara y real de cooperación de la Embajada de USA que realizó un importante evento sobre el tema de tierras en diciembre pasado en Medellín y ha aportados US$ 30 millones para titulación de predios. Los gobiernos de Brasil, Uruguay y Argentina han manifestado su disposición a cooperar.

El Presidente Santos dijo no haber votado la llave del diálogo. Quizá estas circunstancias y el hecho de que tanto Cano como Gabino han dicho claramente “Hombre, hablemos”, estén indicando que se aproxima una nueva posibilidad para la paz. Concuerdo con Posada Carbó: solo si en la sociedad hay un acuerdo básico y de ella surge la iniciativa política.

Redepaz

domingo, 2 de enero de 2011

2010: Los partidos

Luis I. Sandoval M.


LOS PARTIDOS Y SUS PERSONEROS SON percibidos más como actores de escándalo que como aportantes de soluciones a los problemas del país.

Tal es la impresión al fin de año con situaciones como las que viven el Partido de la U y el Partido Conservador por actuaciones en el anterior gobierno, el Polo Democrático por actuaciones u omisiones de sus alcaldes en Bogotá y otros partidos en razón del cobijo que otorgan a personajes próximos a las mafias y el paramilitarismo. Sin embargo, los partidos tramitaron en 2010 las elecciones parlamentarias de marzo y las presidenciales de mayo y junio.


El impulso del referendo reeleccionista fue obra de un bloque de partidos a la derecha del espectro, que cabalgó sobre la popularidad del presidente, se financió irregularmente y quiso convencer al país de que fuera de la seguridad democrática entendida a la manera uribista no había salvación. El 26 de febrero la Corte Constitucional, a través de un fallo demorado pero contundente, descartó la reelección y abrió el juego de opciones.


El 20 de marzo se realizaron las elecciones de Congreso de la República en las cuales, a pesar de estar vivo el proceso de la parapolítica, los partidos en el poder volvieron a acoger a personas cercanas a las mafias y el paramilitarismo, en particular en la Costa Caribe. Un partido surgió focalizado en cumplir esta función: el Partido de Integración Nacional, PIN. No se produjo la sanción política que se esperaba por parte de la sociedad que condujera a una renovación a fondo del Congreso.


El uribismo tuvo tres candidatos finales en la contienda por la Presidencia: Juan Manuel Santos de la U., Noemí Sanín del Partido Conservador, Germán Vargas Lleras de Cambio Radical. Se quedó en el camino por los escándalos de su gestión en el Ministerio de Agricultura el candidato preferido del presidente, Andrés Felipe Arias. Triunfó Santos con una votación inusitada de 9 millones de votos en segunda vuelta, el 30 de junio.


Dada la enorme carga de escándalos de corrupción en el gobierno de Uribe Vélez la campaña política de 2010 tuvo la ética pública como preocupación central, lo cual precipitó la ola verde alrededor del recién nacido partido de los ex alcaldes Garzón-Mockus-Peñalosa-Fajardo. El centro político adquirió organicidad.


La izquierda, por su falta de reflejos para jugar con agilidad, sujeta a las chuzadas y a la estigmatización desde el alto gobierno, redujo su representación parlamentaria, durante la mayor parte de la campaña tuvo un candidato sin partido y no logró cuajar la estrategia de frente antiuribista haciendo uso de la más reciente reforma política que posibilita las coaliciones y las consultas interpartidistas.


En el campo de la continuidad se constituyó la Unidad Nacional liderada por el Presidente con la novedad de que a las fuerzas más caracterizadamente uribistas se suman Cambio Radical y el Partido Liberal, con un sello de republicanismo atado al gran capital. Los diferentes tienen un futuro incierto: Partido Verde, Polo Amarillo, Corriente Petrista... ¿Será inatajable una relativa recuperación primero del Partido Liberal y luego del Partido Conservador? ¿El santismo desplazará al uribismo?


El estilo de Santos, menos polarizante, dispuesto a algunos cambios, se abre camino mientras el uribismo puro experimenta serias dificultades. Seguimos en conflicto, en una democracia de minorías, con partidos enanos y caudillismos hipertrofiados, con pobreza extrema, desastres naturales y reformas en discusión, así se aproximan las elecciones territoriales de 2011…